Metanfetamina (MDMA)

Su nombre científico es 3,4 MetilenDioxiMetAnfetamina (MDMA) pero se conoce popularmente como éxtasis.

Es un derivado amfetamínico (actualmente existen más de 270 derivados) que pertenece al grupo de las feniletilaminas.

Acostumbra a encontrarse como pastillas o cápsulas de diferentes colores, formas y logos.

La vía de administración es la oral.

Su composición y concentración varía mucho de unas pastillas a las otras. El 30% de las pastillas analizadas contenían MDMA, las otras eran diferentes derivados amfetamínicos o de otras sustancias.

Los efectos...

• la "subida" se experimenta a los 30 minutos y se caracteriza por:
  • tensión mandibular
  • boca seca
  • sudoración
  • euforia y ganas de bailar
  • desaparición del cansancio
• durante el "mantenimiento" hay un aumento de la euforia y se experimenta los siguientes efectos:
  • efecto "empactògeno" (facilidad y potenciación de la capacidad para sintonizar con la resta de gente). 
  • efecto entactògeno (facilidad y potenciación de la capacidad de conexión con uno mismo).
• La "bajada" se experimenta a las 6 horas aproximadamente, y se manifiesta por:
  • Cansancio, insomnio, disminución del hambre.
  • Bajo estado de ánimo y agotamiento mental ("depresión post-éxtasis")

Otros riesgos:

• Golpe de calor. Subida brusca de la temperatura corporal que puede llegar a producir un "colapso" mortal. Acostumbra a darse en espacios cerrados, cuando no se para de bailar ni se bebe agua o refrescos suficientes (y el alcohol deshidrata).
• Crisis de ansiedad. Caracterizada por la sensación que "la pastilla no deja de subir". Produce angustia, confusión, irritabilidad.... es una de las reacciones más comunes y que hace que la "bajada" sea más fuerte.
• El consumo continuado incrementa los riesgos de los efectos no deseados (paranoias, depresiones, ataques de pánico...). Y a nivel físico el corazón y el hígado se pueden ver afectados.

No hay dependencia física demostrada pero si psicológica.

Alta tolerancia.

Se desconoce la dosis letal de MDMA. Las muertes relacionadas con esta sustancia se causaron por reacciones adversas idiosincrásicas en las que se combinaron:

• Un patrón de consumo muy concreto (cuantidad, mezclas, ausencia de agua...)
• Una predisposición biológica (sudoración temperatura corporal...)
• Un ambiento adverso (el de las discotecas que potencias la toxicidad del MDMA).